Cada ser humano con su propia historia y con su propia vida. Como si de un túnel se tratara, vamos recorriendo el camino buscando la ansiada luz al final del corredor. No sabemos hacia dónde nos llevará, pero sí sabemos que las travesias se hacen más ligeras cuando se va acompañad@.
Porque «vivir no debería depender de cuán largo y profundo es el túnel que nos toca recorrer a cada un@, sino de la capacidad que tenemos tod@s de iluminar los túneles de los demás, y cómo los demás pueden iluminar los nuestros».